nervo en albalearning

Amado Nervo

"El balcón interior"

Los balcones: entre el cielo y la tierra...

Biografía de Amado Nervo en AlbaLearning

 
 
[ Descargar archivo mp3 ]
 
Música: Clementi - Sonatina Op.36 No.1 in C major - 2: Andante
 
El balcón interior
     

EL Alma está asomada a su balcón.

Pasa un filósofo y le dice: «Ven conmigo; vamos al Dolor. El Dolor está hecho para pulirnos. Después ha de venir el reposo. Luego el Dolor de otra vida. Cada vida pondrá una faceta más en el diamante interno... Y así ascenderás por la escala, por la escala infinita...»

El Alma le escucha en silencio. El filósofo pasa.

Un segundo filósofo se acerca. Es radioso y noble. Le dice: «Dios lucha con una necesidad eterna y ciega; de allí el mal. Pero en esta lucha el espíritu divino obtiene triunfos parciales; de allí el bien. Triunfará al fin totalmente, y el Universo realizará entonces la perfección absoluta.»

El Alma no responde. El filósofo pasa.

Viene otro: «Tú— murmura— eras bella, poderosa y feliz en el Reino de Dios. Pero caíste por orgullo. Ahora expías. Dios te perdonará cuando pase la sombra de este Universo, amasado para tu penitencia...»

«Tú, más bien— rectifica otro filósoio— naciste ya castigada. ¿Por qué? Porque otros pe caron por ti, allá en un paraíso lejano, donde un hombre y una mujer quisieron saber, probando el fruto de la ciencia prohibida. Te redimirá, no obstante, la sangre de un justo que murió hace dos mil años. Después irás a un paraíso donde angélicas liras adormecerán tu eterno éxtasis.»

El Alma calla; sonríe. El filósofo se va pensativo.

Y pasa otro, y otro.

Este dice: «La vida es un experimento; es un medio de conocer, y es, asimismo, fuerza, poder... Sé fuerte; vence siempre; esa es la moral...»

Estotro dice: «La vida no es más que una representación de la Voluntad. La Voluntad es lo único que existe per se. Tú no eres sino voluntad, vuelta visible.»

Dice aquél: «No preguntes nada a tu inteligencia, porque es posterior a la Vida. Pregúntalo todo a tu instinto: él está en el secreto...»

Afirma el de más allá: «La vida es la acción, sólo la acción. Tú misma estás fabricando a cada instante el Universo.»

Y viene, por último, atezado, cenceño, grave, un místico de Benarés, que cuchichea: «¡La vida es ilusión... «Maya» «Maya» Tú eres integral mente Dios, como yo, como todos. La personalidad es una ilusión: «Maya» Mayal»

El Alma, indolente, deja pasar a éste como a los anteriores.

Sigue asomada a la ventana; cae la tarde; se ensombrece el paisaje. A lo lejos no se ve ya venir la blanca túnica de ningún filósofo... El Alma cierra el balcón, y se vuelve tristemente al camarín con su porqué...

(Los balcones. Biblioteca nueva. Madrid. 1920)

Inicio
 

Índice del Autor