Cuentos y Leyendas Populares en AlbaLearning

Cuentos y Leyendas Populares

"¿Por qué el mono congo grita tan fuerte?"

(Cuento Bribri)

Costa Rica

 

 
 
 
[ Descargar archivo mp3 ]
 
Música: Mozart (Menuet)
 
¿Por qué el mono congo grita tan fuerte?
 

El mono congo, dicen los mayores, era un hombre corpulento. Tenía un caracol que usaba para gritar, pero sonaba muy feo. Una vez que andaba por ahí, escuchó a alguien tocando un caracol: ¡Ese sí que sonaba bonito! Realmente le gustó como sonaba.

Entonces se fue a ver quién sonaba aquel caracol, y vio que era el tigre.

El mono pensó:

- Vamos a ver... ¿cómo puedo apoderarme yo de ese caracol?

Se quedó cavilando y al rato se le ocurrió una gran idea:

- ¡Ya sé! - y se fue a decirle al tigre:

- Oiga, señor, ¿sabe qué?, mi caracol suena más fuerte que el suyo.

El tigre le respondió:

- Eso es lo que usted dice.

Entonces el mono insistió:

- Sí, sí, es cierto, ¿no quiere que vayamos a comprobarlo? Así usted podrá ver que el caracol mío suena más que el suyo.

Entonces el tigre pensó: “nada pierdo”, y le contesta:

- Bueno, está bien, fijemos una fecha.

Así, se pusieron de acuerdo: “El día tal te espero allá en aquella cuesta”¨. ¡Muy bien!

Finalmente llegó el día que habían acordado. El mono llegó primero y fue a sentarse al pie de un árbol. Llevaba dos jícaritos huecos; metió una mano en cada uno, y ahí se quedó jugando sentado en el tronco. Golpeaba los jícaros uno contra otro, haciéndolos sonar: toc, toc, toc... En eso estaba cuando ve que viene el tigre y entonces le dice:

- ¿Trajo su caracol?

- Claro que sí -le responde el tigre.

Entonces vuelve el mono y le dice:

- ¿Pero... no le gustaría sonar primero estos jicaritos? ¿No ve qué lindo que los sueno yo?

Entonces el tigre le responde:

- Bueno, está bien; vamos a probarlos.

Y dice el mono:

-Pero tiene que meter las manos en los jícaros, así como las tengo yo metidas.

Entonces replica el tigre:

-Está bien -dice el tigre- métamelos en las manos.

Y sigue el mono:

- Pero deje su caracol ahí.

El tigre puso su caracol por ahí, luego le extendió las dos manos. Entonces el mono le metió los jícaros en las manos y se los amarró bien amarrados. Hecho esto, el mono agarró el caracol del tigre de un solo tirón y salió corriendo hacia las ramas de los árboles, escapándose por entre las copas.

Se había llevado el caracol del tigre, y éste, con las manos metidas en los jícaros, no podía subirse al árbol, ni podía perseguir al mono, que ya iba lejos con el caracol del tigre. El tigre se quedó sentado muy triste. El mono se salió con la suya, se llevó el caracol y dejó al tigre abandonado, con las manos amarradas en los jícaros.

Por eso es que el tigre grita tan feo y tan fuerte, mientras que el mono congo grita muy lindo y muy fuerte también.

Inicio
     
 

Índice

Cuentos Infantiles y Juveniles

Fábulas